1. Introducción:
El libro me ha parecido perfecto, lleno de sentimientos y de valores, muchos de ellos en desuso, por eso quiero hacer especial hincapié no solamente en actividades de refuerzo para después de leerlo, sino también en otras antes de hacerlo.
Creo que es una experiencia que deberían de vivir todos los niños y que todos en un verano de nuestra vida hemos vivido. Me parece muy original el cómo está escrito esta novela, desde la visión de los dos niños, que viven la misma historia y cada uno lo explica con sus propios sentimientos.
Aunque la historia se nota que ha pasado hace unos años, me doy cuenta que las personas tenemos los mismos problemas, no solemos valorar lo que tenemos, porque está ahí, lo vemos normal y natural. Empezamos a valorarlo cuando una persona de fuera nos dice todo lo bueno que poseemos.
No todos los tesoros son materiales, esos son los menos importantes. Lo que realmente merece la pena son los recuerdos, esos sí son los verdaderos tesoros que poseemos las personas.
Como en muchas ocasiones he podido comprobar y últimamente ha sido en las prácticas, los niños son los que nos dan lecciones de responsabilidad y madurez y se anticipan a los problemas antes que nosotros.
Quiero con las actividades que propongo, sacar de los niños de esta edad, lo mejor de su interior y que no tengan miedo de demostrar ante sus compañeros sus debilidades, que reflejen tanto por escrito como oralmente sus vivencias más emotivas y las compartan con todos sus compañeros.
También quiero proponer actividades no sólo después sino antes de leer el libro, para que los niños desarrollen su imaginación e interés por el libro que se propone.
La actividad número ocho de antes de la lectura, es una propuesta oral para dialogar entre todos un valor muy importante en esta edad, la amistad, para afianzar entre ellos el respeto, comunicación y tolerancia. Además de la seguridad en sí mismo a la hora de hablar en público y expresar sin miedo sus opiniones, a la vez que el respeto por la de los demás.
2. Resumen:
● Argumento:
Sofía vive en Madrid y un verano, invitada por un amigo de su padre, pasa sus vacaciones en un pequeño pueblo costero.
Allí logra hacer amistad con todos los niños y en especial con uno, con Miguel.
Miguel tiene once años y le encanta tocar la guitarra; Sofía tiene trece y le gusta jugar con todos e incluso con los más pequeños, disfruta organizando juegos.
Miguel está preocupado porque su tío Ginés quiere vender su parte de las tierras, para edificar y se da cuenta que así se perderá su playa, su casa y sus juegos. Decide contárselo a su amiga Sofía y se van a hablar con su abuelo Paco.
Una tarde deciden ir los dos a casa de su tío y le proponen que vaya a la playa al día siguiente que van a hacer una fiesta y que toque la guitarra. Ya en la playa los niños exponen a Ginés el por qué no debe de vender, aunque también el tío expone a los niños lo suyos, que son sinceros y no sólo le mueve el interés.
Miguel decide investigar, porque su padre no habla mucho de su abuela, cuando se lo cuenta a Sofía se van a casa del abuelo a buscar “La caja de los tesoros” de su abuela Isabel. En la caja encuentran una carta dirigida a su hijo José y se la lleva para dársela a su padre.
Sofía hace su “caja de los tesoros” y pide a cada uno de sus amigos que le de algo hecho por ellos, esa misma noche se bañan todos juntos en el mar y se despiden, porque termina el verano.
En la cama, Miguel no puede resistirse y lee la carta; por la mañana se la da a su padre y se da cuenta como al leerla se emociona. José se da cuenta que su madre le quiere y promete a su hijo que la nueva hermanita se llamará Isabel como su madre.
Miguel llama por teléfono a Sofía para contarle todo, aunque todavía no sabe nada de lo de la playa. Un día llega Ginés y el abuelo y les comunica a todos que había vendido, pero para un camping, así no habría edificios altos alrededor y podrían seguir disfrutando de la playa, la arena y las estrellas.
En una caja de zapatos, Miguel mete todo lo que para él es importante, hasta una grabadora en donde están todos sus recuerdos de ese verano, esa va a ser su “caja de los tesoros”.
Después de unos años, Sofía se saca el carnet de conducir y va hasta la playa, mientras se va acercando a la casa ve a la madre y a un chico moreno, es Miguel y enseguida la reconoce. Después de tanto tiempo vuelven a encontrarse.
3. Conclusiones. Reflexión personal sobre el trabajo y la lectura del texto:
Es importantísima tanto la lectura como su comprensión. Eso llevará al alumno a satisfacer con corrección todas y cada una de las actividades propuestas en esta Unidad Didáctica.
Es fundamental después el entablar el diálogo y la comunicación entre todos, para saber si les ha gustado, sus reacciones, curiosidades, creatividad, participación…
Si todo esto se puede llevar a cabo, será perfecto para que cuando lean un libro lo hagan por placer, disfrutando de todo lo que pueden aprender y sensaciones que pueden experimentar.
Sobre la lectura del texto, decir que es un libro que no tiene edad para consumirlo, puede llegar al corazón tanto de niños como de adultos, y todos o casi todos nos podemos ver reflejados en esta bonita historia de un verano. Es ameno y fácil de leer y sobre todo lleno de valores, sentimientos y de algo tan importante como es la amistad.